Según un estudio de Ipsos, solo un 64% de españoles estaría dispuesto a ponerse la vacuna “ahora”, siendo el segundo país europeo con menor intención tras Francia (54%)
Muchas de las esperanzas en la lucha contra la pandemia de la COVID-19 están puestas en el desarrollo de vacunas. En este sentido, Pfizer acaba de anunciar que su candidata a vacuna, desarrollado junto a BioNTech, alcanza un 90% de efectividad según los datos provisionales del ensayo en fase III (y en los participantes del estudio sin evidencia de infección previa por SARS-CoV-2).
Avances como este acercan la posibilidad de poder iniciar las vacunaciones frente a la COVID-19 en los próximos meses. Pero, ¿qué disposición tiene la población para ponerse la vacuna? Ipsos ha querido conocer el pulso de los ciudadanos frente a ello realizando un estudio junto al Foro Económico Mundial, cuyos resultados son muy significativos.
A nivel mundial, el 73% de los ciudadanos admite que si la vacuna contra la Covid-19 estuviera ya disponible se la pondrían, un dato que baja un punto respecto a la misma pregunta realizada en agosto. En el caso de España, la intención de vacunarse en este momento se reduce en 8 puntos, ahora solo estarían dispuestos a ponerse la vacuna un 64% de la población española, mientras que en agosto eran un 72%. Esto coloca a España como el segundo país con menos intención de vacunarse en Europa, sólo por detrás de Francia (54%) y seguidos muy de cerca por Italia (65%).
Además, los españoles no sólo no se vacunarían ahora mismo, sino que serían también los que más tardarían en hacerlo una vez que la vacuna estuviera lista. Solo el 13% de los españoles lo harían de manera inmediata, frente a un 22% a nivel global. El 38% de los españoles se vacunaría tres meses después de la llegada de la vacuna. Sin embargo, la mayoría de españoles preferiría esperar más tiempo para vacunarse, 6 de cada 10 lo haría en un plazo de 1 año.
Sobre los motivos que llevan tener reticencias hacia la vacuna, la rapidez de los ensayos clínicos sería la principal causa para el 48% de los españoles que afirma que no va a vacunarse, convirtiéndose así en el primer país a nivel mundial, junto con Brasil, más preocupados en este sentido. El segundo motivo más común para no vacunarse serían los posibles efectos secundarios que pudieran darse, razón que sitúa de nuevo a España (36%) entre los tres primeros países a nivel mundial más preocupados, únicamente por detrás de Japón (62%) y China (46%).
Con estos datos, España se posiciona como uno de los países menos receptivos a la hora de vacunarse y también como uno de los más pesimistas en cuanto a la llegada de esta posible solución. Mientras que solo el 39% de la población global piensa que la vacuna no llegará hasta pasado un año o año y medio, más de la mitad de los españoles (53%) secunda esta afirmación. El 30% piensa que la vacuna podría estar disponible para mediados del 2021, y solo un 9% está convencido de que aún hay opciones para que esté en el mercado a finales de 2020.
Datos del estudio
Para la realización de este estudio global, Ipsos entrevistó a un total de 18.526 personas de 18 a 74 años en Estados Unidos, Canadá y Sudáfrica, y de 16 a 74 años en Australia, Brasil, China, Francia, Alemania, India, Italia, Japón, México, Corea del Sur, España y Reino Unido, entre el 8 y 13 de octubre de 2020. La muestra consta de aproximadamente 2.000 personas en los Estados Unidos, 1.500 en Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido, y aproximadamente de 1.000 personas en el resto de países participantes.
Las muestras de países como España “pueden tomarse como representativas de la población general”, destaca esta compañía.