Entre las ventajas para el paciente frente a la tradicional destacan un menor: daño, dolor, sangrado e infección
La multinacional tecnológica GMV, en colaboración con el Hospital La Paz de Madrid y la Fundación de Investigación biomédica del propio hospital, Idipaz, celebraron en el día de ayer el encuentro digital «Navegación y cirugía mínimamente invasiva: retos y desafíos», de la mano de la Dra. Marisa Gandía, Neurocirujana del Hospital La Paz y Jefa de la unidad de columna mínimamente invasiva del Hospital Virgen del Mar, junto con Carlos Illana, Responsable de Producto en GMV. El Webinar estuvo moderado por el Dr. Fernando Mugarza, Director de Desarrollo Corporativo de la Fundación IDIS. En él se explicaron las ventajas para el paciente de este tipo de intervenciones y cómo las nuevas tecnologías de navegación, los algoritmos de simulación quirúrgica y la imagen intraoperatoria se convierten en aliados de los especialistas para trabajar con mayor precisión y seguridad.
La cirugía de columna mínimamente invasiva consiste en un conjunto de técnicas que nos permiten acceder a la columna vertebral del paciente de manera menos agresiva que en la cirugía tradicional. La diferencia sustancial frente a la cirugía convencional radica en el abordaje que se utiliza para operar al paciente. En la cirugía tradicional se le practica una incisión amplia, se distrae la musculatura con un separador, y se le opera a través del espacio que creamos.
En la cirugía mínimamente invasiva la incisión que se practica al paciente es más pequeña. No se utilizan separadores sino un sistema tubular que se posiciona mediante neuronavegación o bajo control radioscópico, fijando así la localización para operar. Se van separando los tejidos mediante dilatación y no a través de la desinserción amplia de la musculatura. La diferencia se fundamenta por tanto en el acceso al lecho quirúrgico, que es mucho menos agresivo.
Una vez colocado el separador tubular donde queremos operar y alcanzamos la profundidad y amplitud necesaria, el cirujano coloca el separador definitivo a través del cual puede ver con un microscopio la imagen interior del paciente. Será a través de este canal por el que se procederá a operar.
La Dra. Marisa Gandía ha declarado al respecto que «entre las ventajas para el paciente de la cirugía de columna mínimamente invasiva destacan, sobre todo, la menor pérdida sanguínea, ya que el acceso es más pequeño, y el menor daño a los tejidos circundantes». Postoperatoriamente, «la ventaja fundamental es la reducción drástica de la tasa de infección y el menor dolor, lo cual supone una más rápida recuperación. La mayor parte de los pacientes en las primeras 24 horas empiezan a caminar y se reincorporan a su actividad habitual, mucho más tempranamente que con la cirugía convencional. En definitiva, menor: daño, dolor, sangrado e infección».
Una vez que el cirujano va a operar entra en juego la tecnología especializada de GMV desarrollada en el marco del proyecto con Naviphy. Con su navegador quirúrgico se posibilita al cirujano una mayor precisión. La medicina quirúrgica y la tecnología altamente especializada se dan la mano en la cirugía mínimamente invasiva. Esta nueva forma de hacer Medicina en el siglo XXI permite al cirujano la planeación, simulación y seguimiento intraoperatorio a través de la visualización en tiempo real de imágenes tridimensionales, que ofrecen mayor precisión y garantía de resultados en términos de salud, una pronta recuperación, una mayor seguridad durante la intervención y por lo tanto una mejora en la experiencia vivida por el paciente.
Con los sistemas de navegación, el cirujano puede saber con exactitud la posición del instrumental o revisar el campo quirúrgico en una imagen tridimensional del paciente. Las técnicas computacionales son un avance indispensable que permite optimizar la planificación en el preoperatorio, así como mejorar la precisión y calidad de la técnica quirúrgica. Naviphy tiene como objeto ofrecer imágenes y parámetros en tiempo real de las acciones que está llevando a cabo el cirujano en la intervención, así como los posibles cambios que sufrirá la anatomía del paciente durante la operación.
En este sentido, Carlos Illana, Responsable de Producto de GMV explica que «la combinación de tecnología y cirugía es ya una realidad. Los sistemas de navegación quirúrgica y simulación aplicados a la cirugía mínimamente invasiva están siendo utilizados cada vez más en las operaciones. Por un lado los pacientes se recuperan mucho antes que en la cirugía tradicional, y por otro, la seguridad y precisión de las intervenciones con navegación quirúrgica y cirugía guiada por imagen son claves para un mayor éxito del cirujano en la intervención. En el proyecto Naviphy queremos llevar esta tecnología al siguiente escalón, mejorando los sistemas de posicionamiento actuales e incorporando técnicas de simulación que permitan reducir la necesidad de imagen sin penar la precisión y la seguridad».
Naviphy es un proyecto enmarcado en la convocatoria I+D+I Retos Investigación del Ministerio de Ciencia, Investigación y Universidades, y subvencionado por la Unión Europea (EU) a través de los fondos FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional).
El objetivo de este proyecto de investigación es lograr mayor precisión en cirugías de mama, cerebro y maxilofacial, así como en radioterapia intraoperatoria y braquiterapia, explorando nuevas tecnologías de navegación, desarrollando algoritmos de simulación quirúrgica y evaluando el uso de las diferentes tecnologías de imagen intraoperatoria.
Para ello se ha creado un consorcio liderado por GMV en el que participan el Instituto de Investigación del Hospital Universitario La Paz (IdiPAZ), el Grupo de Modelado y Realidad Virtual (GMRV) de la Universidad Rey Juan Carlos, y la Fundación Canaria de Investigación Sanitaria (FUNCANIS). GMV, en colaboración con el Hospital Universitario Doctor Negrín de Gran Canaria, ya desarrolló un módulo de navegación quirúrgica en el dispositivo de radioterapia intraoperatoria Radiance™ para guiar las intervenciones de cánceres de mama y la aplicación de la radioterapia intraoperatoria, experiencia que está siendo aplicada en el proyecto Naviphy.