«No se dejó de donar sangre ni un día durante toda la pandemia»

Entrevista a Manuel Faustino Valdés, presidente de la Federación Española de Donantes de Sangre (FedSang)

Instituto ProPatiens entrevista a Manuel Faustino Valdés, presidente de la Federación Española de Donantes de Sangre (FedSang), que acaba de convertirse en asociación colaboradora del Instituto ProPatiens. Para ampliar información sobre Fedsang, puedes pinchar aquí.

Pregunta. La donación de sangre es un acto de solidaridad que ayuda a salvar vidas, ¿cuántos donantes hay en España aproximadamente?

Faustino Valdés. Efectivamente, la donación de sangre es un acto solidario que en España está regulado por ley en el Real Decreto 1088/2005, de 16 de septiembre. Tomando como referencia las estadísticas de donación de sangre publicadas en nuestra revista a partir de los datos facilitados por el Ministerio de Sanidad, en España, en el año 2019 se registraron 1.154.196 donantes que hicieron 1.685.301 donaciones, lo que significa que la media de donaciones ha sido de 1,46 donaciones/donante en dicho ejercicio. Si a los donantes los clasificamos por sexos, el porcentaje sería de 59,84% en el caso de los hombres y 40,16% en el de las mujeres. Por supuesto, este último dato no significa que las mujeres sean menos generosas que los hombres, sino que, por sus especiales características, las mujeres pueden donar en un periodo de 12 meses hasta 3 veces, mientras que los hombres pueden hacerlo hasta 4 veces.

P. ¿En qué situación está España con respecto a otros países de nuestro entorno?

F. Valdés. España es un país generoso y solidario por naturaleza que destaca en muchos escenarios en todo el mundo cuando se trata de arrimar el hombro y colaborar. Hay que destacar que, a nivel mundial, nuestro país está bien situado con respecto a países de nuestro entorno, destacando sobre todo en la donación de órganos. Y si nos centramos en la donación de sangre, también podemos afirmar que nuestro país está bien situado, lo cual no significa que sea una competición, ya que nuestro índice de donación se asemeja a la media de los países de nuestro entorno. Concretamente, el índice de donación, que es un dato que se calcula dividiendo el número de donaciones entre 1.000 habitantes, fue de 36,65, destacando por autonomías Extremadura, con un índice de 44,60; Castilla y León, con un 43,61; y Galicia, con un 40,36. Debemos estar satisfechos con estos datos porque España es autosuficiente, aunque también es cierto que en ocasiones es necesario incrementar las campañas de concienciación por bajadas puntuales que se producen en las reservas de los bancos de sangre.

«El índice de donación en España es de 36,65 por cada 1.000 habitantes. Con estos datos, España es autosuficiente, aunque en algunos momentos hay que intensificar las campañas de concienciación por bajadas puntuales en los bancos de sangre»

P. ¿Cree que hay suficiente concienciación social sobre este tema o queda todavía trabajo por hacer?

F. Valdés. A veces es necesario incrementar las donaciones por motivos de stock y, por eso, se hace necesario intensificar el llamamiento a donar. Sin embargo, en líneas generales, la concienciación es buena, aunque nunca es suficiente porque debemos de  tener en cuenta una serie de factores importantes, como son que la sangre no es posible elaborarla de forma artificial, siendo la donación la única forma de conseguirla, o que tiene unos tiempos de caducidad muy cortos que hace necesaria su continua renovación. En definitiva, hay una serie de aspectos de la sangre y su donación a tener en cuenta y que obligan a estar en permanente campaña a las asociaciones de donantes, a los centros de transfusión, y a las autoridades sanitarias para que la promoción y la concienciación sea una constante.

P. ¿Qué podría hacerse para seguir avanzando? ¿Deben las administraciones incrementar su esfuerzo?

F. Valdés. Desde el asociacionismo de los donantes de sangre procuramos siempre mantener viva la llama de la promoción y la concienciación para donar sangre. Estamos hablando de organizaciones que se fundaron hace décadas, las más veteranas han cumplido ya los 50 años, y se trata de asociaciones sin ánimo de lucro que cuentan con escasos medios económicos para su funcionamiento. Su principal activo son los voluntarios y estos son quienes realizan desde siempre una importante labor de forma voluntaria, altruista y silenciosa, haciendo divulgaciones en centros de enseñanza, empresas, asociaciones vecinales, etc., amén de otras tareas relacionadas con sus organizaciones. Otra faceta importante de las asociaciones de donantes de sangre es la importante labor social, al ser las encargadas de reconocer y distinguir públicamente a los donantes que alcanzan ciertas cifras de donaciones, los cuales son convocados a sus actos donde se les hace entrega de distinciones por su constante generosidad. Por cierto, unos actos que la llegada de la pandemia ha obligado a cancelar en su totalidad y esperamos retomar en cuanto sea posible.

Sobre las administraciones, creo que, independientemente que quien esté al mando de ellas, se debería demostrar siempre una voluntad clara de reconocimiento hacia el papel que juega el conjunto del asociacionismo y hacer siempre el esfuerzo necesario para apoyarlas si queda demostrado que generan bienestar social, como es el caso de las asociaciones de donantes, las asociaciones de pacientes, etc., pero es sabido que, por motivos varios y variados, no siempre se da esa ‘afinidad’ con el asociacionismo por parte de las instituciones y administraciones. De lo que sí estamos seguros es de que su labor siempre es bien recibida, comprendida, e incluso demandada por la sociedad en general.

P. ¿Cuáles son los requisitos que debe cumplir una persona para ser donante de sangre?

«Para ser donante de sangre no es necesario ser superdotado ni un superhéroe, solo hace falta tener entre 18 y 65 años, pesar más de 50 kilos y gozar de buena salud. Además, hay una serie de exclusiones temporales o permanentes sujetas a la legislación. Si alguien no cumpliese estos requisitos, en el mismo punto de donación será rechazado: la donación tiene que ser segura para el donante y para el receptor»

F. Valdés. Por supuesto, para ser donantes de sangre no es necesario ser superdotado ni ser un superhéroe. Tan solo se necesita cumplir con los requisitos básicos que establece la legislación, independientemente de la nacionalidad, el sexo, la etnia, la profesión, etc. Se puede afirmar con rotundidad que la donación de sangre es un acto transversal que puede hacer cualquier persona que cumpla unos sencillos requisitos: se necesita tener entre 18 y 65 años, pesar más de 50 kilos y gozar de buena salud. Si alguien que quiera donar no cumple estos requisitos, en el mismo punto de donación será rechazado, de la misma manera que no sería apto para donar por una serie de exclusiones temporales o permanentes también sujetas a la legislación. Hay que ser conscientes de que la donación de sangre debe ser segura para el donante y para el receptor, y por eso se cumple a rajatabla con los protocolos y normas establecidos. Aprovecho para resaltar que el pasado 2020, durante el confinamiento domiciliario a causa de la pandemia, donar sangre ha sido una de las actividades imprescindibles y justificadas para quienes han podido y querido realizar este acto solidario. Una actividad como esta no podía parar, por lo que se establecieron por parte de las autoridades sanitarias nuevas medidas y protocolos de protección especiales para evitar posibles contagios por coronavirus. Es más, durante  todo el tiempo que llevamos de pandemia y restricciones, no se dejó de donar sangre ningún día en España.

P. Han disminuido las donaciones de sangre durante la crisis de la Covid-19. ¿Qué les diría a las personas que han dejado de ir?

F. Valdés. Por varias razones, lógicamente, sí. En primer lugar, se detectó un cierto temor a los contagios y eso provocó que se redujese algo la asistencia de donantes al principio de la pandemia. También hay que tener en cuenta que los protocolos obligaban a que los donantes acudiesen a donar tomando una serie de estrictas medidas para evitar posibles contagios entre los donantes y el personal sanitario encargado de las extracciones, ralentizándose por ese motivo el proceso normal de las donaciones. Sin embargo, quiero señalar que la paralización de buena parte de las cirugías y otras actividades hospitalarias durante las etapas más duras de la pandemia permitieron mantener bajos los consumos de sangre y eso compensó en buena medida la falta de donaciones.

Durante la pandemia, se supone que muchas personas han decidido dejar de donar hasta que todo se normalice, pero podemos asegurar que los protocolos actuales para donar sangre en España son muy seguros, ya que las normas y, sobre todo, los profesionales sanitarios encargados de las extracciones, hacen mucho hincapié en la seguridad. Por tanto, animamos a los indecisos y a los que han pospuesto su decisión de comenzar a donar sangre o seguir donando habitualmente, a que lo hagan con total tranquilidad porque es totalmente seguro.

P. ¿Cómo y por qué nace la Federación Española de Donantes de Sangre?

F. Valdés. Desde hace décadas existen asociaciones y hermandades de donantes de sangre diseminadas por toda la geografía española. Como es lógico, todas ellas son independientes entre sí, y la necesidad de unificar criterios y unirse en torno a una organización que las aglutinase se vio como algo positivo. Efectivamente, la FedSang impulsó siempre iniciativas muy valiosas a lo largo de su historia que han influido de modo significativo en el conjunto de las asociaciones. Debo resaltar que el día del año más señalado para la FedSang es el 14 de junio, el Día Mundial del Donante de Sangre, en el que celebramos de un modo especial el reconocimiento como ‘Grandes Donantes’ a las personas que las asociaciones acreditan que durante el año anterior han alcanzado las 75 donaciones, en el caso de los hombres y las 60 donaciones en caso de las mujeres. También se reconoce y distingue en ese mismo acto como ‘Méritos Nacionales’ a personas, empresas, instituciones, etc. que hayan destacado por su labor de apoyo a la causa de la donación de sangre durante ese mismo periodo.

P. ¿Cuáles son los principales objetivos de FedSang para los próximos años?

F. Valdés. Los objetivos actuales de la FedSang son los mismos que marcan los principios de los donantes. Queremos seguir siendo una organización sin ánimo de lucro, aconfesional, sin ideología y apolítica que integre en su seno a las organizaciones de donantes de sangre que libre y voluntariamente quieran pertenecer a esta Federación. Además de lo anterior, nuestros objetivos pasan también por representar a nuestros asociados cuando y donde estos lo requieran y reivindicar también el destacado papel que juegan estas asociaciones y sus voluntarios para conseguir donantes de sangre. Otra meta es formalizar alianzas con otras organizaciones de interés compartido y que resulten interesantes para todos, como es el caso del reciente convenio de colaboración firmado con el Instituto ProPatiens.

«Una de nuestras metas es formalizar alianzas con otras organizaciones de interés compartido, como es el caso del reciente convenio de colaboración firmado con el Instituto ProPatiens»

P. ¿Qué ventajas tiene para los donantes formar parte de FedSang?

F. Valdés. Aunque no tratamos directamente con los donantes de sangre, a través de nuestros asociados queremos influir de forma activa en las asociaciones para que los donantes perciban que se les representa adecuadamente. Para ello, estamos implementando el uso de las redes sociales y otras herramientas cibernéticas como instrumentos principales para nuestro desarrollo, además de servir de contacto con todo aquel que quiera informarse sobre el tema de la donación, por lo que al mismo tiempo estamos abiertos a interactuar con quien nos encuentre y desee entablar contacto con nosotros. Máxime en estos tiempos de restricciones de movilidad que nos impide tener contacto directo con las personas.

P. ¿Cree que es importante la profesionalización de las asociaciones? ¿Qué considera que les puede aportar su acuerdo con Instituto ProPatiens que, precisamente, centra parte de su esfuerzo en potenciar esta profesionalización?

F. Valdés. Antes de responder, quiero agradecer al Instituto ProPatiens su predisposición a integrarnos en su red de asociaciones. Son una organización de pacientes que ‘a priori’, nada tiene que ver con nosotros. Sin embargo, como ya indiqué anteriormente, en nuestro caso se trata de organizaciones de carácter voluntario y altruista que tratan de concienciar a personas sanas para que hagan un gesto generoso llamado donar sangre o hacerse donante de sangre para así ayudar a pacientes de todo tipo. Entiendo que ese sería el nexo de unión que nos puede llevar poco a poco a una colaboración mutua más intensa. Por tanto, en algo sí estamos relacionados los pacientes y los donantes.

En respuesta a la segunda pregunta, debo decir que, en las asociaciones, nuestros cuadros directivos están formados por personas procedentes de los más diversos campos profesionales que han elegido este voluntariado, por lo que siempre pueden resultar interesante estudiar propuestas que aumenten las capacidades de quienes dedican su tiempo a esta actividad. Es por eso que nuestro reciente acuerdo con ProPatiens puede aportar fortaleza y profesionalización a nuestras organizaciones para que, a su vez, estas crezcan gracias a las oportunidades que nos pueda ofrecer este acuerdo. Yo, por mi parte, quiero dejar patente nuestra disposición a colaborar y quedan invitados a contar con nuestra organización siempre que lo estimen conveniente.

No quiero finalizar esta entrevista sin saludar a las asociaciones de pacientes y reconociendo su importante función social. Desde la FedSang les animamos a seguir trabajando con energía por el bien de sus representados. La vida y la salud es algo que debemos cuidar y proteger siempre porque hay que tener presente siempre que, desde antes de nacer, cualquier persona está expuesta a padecer alguna enfermedad o a sufrir algún accidente a lo largo de nuestra vida. Debemos ser siempre conscientes de ello y estar prevenidos.