¿Qué es el ADN?
El ADN es una secuencia de aproximadamente tres mil millones de moléculas (nucleótidos), en el caso de una célula animal típica.
Donde están, de forma codificada, todas las instrucciones genéticas usadas en el desarrollo y funcionamiento de todos los organismos vivos.
Para visualizarlo mejor, pensemos en el ADN como una cremallera. Cada célula contiene ADN de una longitud de un metro de tamaño. Tened en cuenta que una célula es mil veces más pequeña que un milímetro. Increíble, ¿verdad? La célula tiene sus mecanismos para enrollar esta “cremallera” en su núcleo formando los cromosomas.
El ADN, al igual que una cremallera, está formado por dos cadenas, y ambas están unidas entre sí de forma muy concreta. Cada diente de la cremallera es una molécula de las tres mil millones y está emparejado con otro diente de la cadena de enfrente. A lo largo del ADN se van repitiendo cuatro tipos de moléculas diferentes (Adenina, Timina, Guanina y Citosina), y sólo forman pareja con uniones estables A-T y G-C, siendo imposible una unión A-G o T-C.
Imaginad que tenemos una cremallera de un metro y que a lo largo de ella se van repitiendo dientes de cuatro colores diferentes, cada color para un tipo de molécula concreto. Podemos tener un número infinito de combinaciones de moléculas en una cadena de ADN. Un ejemplo de una millonésima parte del ADN puede ser:
TTCCAGAGTGTCAGA
AAGGTCTCACAGTCT
Este ejemplo es una unidad de información dentro del genoma que contiene todos los elementos necesarios para su expresión de manera regulada. A esto se le conoce como gen, al que se considera la unidad de almacenamiento de información genética.
A partir del ADN y gracias a cómo se colocan estos dientes de la cremallera, irán dando lugar a los genes y éstos irán produciendo mediante su descodificación de forma continua y regulada por muchos factores, las proteínas.