El 30% de los supervivientes de un ictus quedará en situación de dependencia funcional

Según han avisado diversos expertos reunidos en los ‘Diálogos EFE Salud’ con motivo de la celebración, este 29 de octubre, del Día Mundial del Ictus

El 30% de los supervivientes de un ictus quedará en situación de dependencia funcional, según han avisado diversos expertos reunidos en los ‘Diálogos EFE Salud’ con motivo de la celebración, este 29 de octubre, del Día Mundial del Ictus.

Este año la Fundación Freno al Ictus, la Sociedad Española de Neurología (SEN) y el Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares (GEECV) de la SEN, han querido incidir en la escasa atención posterior a la rehabilitación del afectado y en su inclusión social.

En España unas 120.000 personas sufren un ictus cada año, de los cuales al menos un 15 por ciento fallecerá y entre los supervivientes, en torno a un 30 por ciento quedará en situación de dependencia funcional. Esta enfermedad cerebrovascular es ya la segunda causa de muerte en la población española (la primera en mujeres), la primera causa de discapacidad adquirida en el adulto y la segunda de demencia.

Asimismo, en todo el mundo, cerca de 14 millones de personas sufrirán un ictus este año y, como resultado, 5,5 millones morirán. De estas personas que sufren un ictus la mitad quedará con secuelas y de éstas una tercera parte sufrirá secuelas incapacitantes que les harán dependientes.

La buena noticia es que el 90 por ciento de los ictus se pueden prevenir con un adecuado control de los factores de riesgo modificables de esta enfermedad. «La actuación sobre los hábitos de vida constituye una piedra angular en la prevención primaria y secundaria del ictus. La abstinencia o cese del hábito tabáquico, del consumo excesivo de alcohol, evitar la exposición a estrés crónico, seguir una dieta saludable, así como la práctica regular de actividad física, son medidas fundamentales para reducir el riesgo de sufrir un ictus. Por otra parte, es necesario un adecuado control de la tensión arterial, el azúcar y el colesterol», ha explicado la coordinadora del Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares de la SEN, María Alonso de Leciñana,
María Alonso de Leciñana.

Además de una buena promoción de la salud, los expertos han destacado la necesidad de realizar controles médicos periódicos para controlar adecuadamente otras enfermedades que generan riesgo de ictus como la fibrilación auricular, diabetes, hipertensión, obesidad e hipercolesteronemia.

«En el caso del ictus, cada minuto, cuenta. Por eso es tan importante llamar al 112 ante la presencia de algún síntoma de esta enfermedad neurológica como es: pérdida de fuerza repentina de la cara, brazo y/o pierna de un lado del cuerpo; la alteración repentina del habla con dificultad para expresarse o para entender lo que se nos dice; la pérdida súbita de visión parcial o total en uno o ambos ojos; o dolor de cabeza súbito de intensidad inhabitual y sin causa aparente», ha apostillado la doctora.

Dicho esto, ha informado de que existe una ventana de tiempo de pocas horas donde en un hospital preparado pueden hacer mucho para ayudar al afectado con técnicas de intervención para reestablecer el flujo sanguíneo en el cerebro y generar la menor muerte neuronal.

¿DESPUÉS DE UN ICTUS QUÉ?

Por su parte, el presidente de la Fundación Freno al Ictus, Julio Agredano, ha advertido de que actualmente en España existe un sistema público deficitario en atención posterior a la rehabilitación del afectado y en su inclusión social. «Tenemos un sistema de salud pública relativamente bueno en atención aguda, ayuda a salvarte la vida, te ayuda a salir del hospital. Pero luego la situación de rehabilitación y de inclusión en tu entorno es muy complicada», ha añadido.

Además, Agredano ha detallado que las consecuencias de un ictus no solo las viven los 120.000 afectados al año en España, sino que es una situación que afecta a todo su entorno. «Tengamos en cuenta que no es lo mismo que lo sufra una persona de 85 años, a que le suceda a los 35 o 45 años, cuando lo más probable es que esa persona tenga una familia que depende financieramente de su trabajo o niños pequeños que cuidar, con lo cual el impacto que está provocando en su entorno es muy elevado», ha argumentado.

Asimismo, el ciclista triple ganador de la vuelta ciclista a España, Alberto Contador, que sufrió un ictus en 2004 durante una Vuelta a Asturias a consecuencia de un cavernoma cerebral congénito, gracias a su lema ‘Querer es poder’ logró una recuperación completa, llegando conseguir importantes victorias entre las que se encuentran 7 Grandes Vueltas (Giro de Italia 2008 y 2015, Tour de Francia 2007 y 2009 y Vuelta España 2008, 2012 y 2014).

El ciclista ha aprovechado este encuentro para animar a todas las personas que tengan el mínimo síntoma a que acudan cuanto antes al hospital porque cada segundo que pase en un ictus puede agravar la situación. «Es una enfermedad que debería ser mucho más conocida «aún sigue siendo insuficiente, el Ictus aún es una enfermedad muy desconocida, pese a su gran impacto en nuestro día a día, el objetivo de todos los que estamos aquí, es que la gente lo conozca, que sepan la sintomatología y que sea consciente de la importancia que tiene», ha aseverado Contador.

Por este motivo, la Fundación Alberto Contador y la Fundación Freno al ICTUS han lanzado la primera edición de ‘Pedalea contra el ICTUS’, una marcha familiar y social para visibilizar y concienciar a la población sobre la enfermedad.

La cita ha contado con el apoyo de la alianza BMS-Pfizer, Bayer, Boehringer Ingelheim, Daiichi Sankyo, Novonordisk, Sanofi y Medtronic y la colaboración de la Fundación Contador y la Asociación de Informadores de la Salud (ANIS).