El 95 % considera además que se necesitan con «mucha» o «bastante» urgencia más recursos económicos y un aumento en las plantillas de profesionales que atienden en el Sistema Nacional de Salud
Después de estos últimos meses vividos con la pandemia del coronavirus, un 86,2 por ciento de la población afirma que sería conveniente reformar la sanidad española, de ellos el 95 considera además que se necesitan con «mucha» o «bastante» urgencia más recursos económicos y un aumento en las plantillas de profesionales que atienden en el Sistema Nacional de Salud.
Estos datos se desprenden del último Barómetro de octubre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que coincide con la convocatoria de huelga oficial para el próximo 27 de octubre del colectivo médico del SNS, provocada por la actual situación que atraviesan los profesionales tras más de siete meses de pandemia.
Concretamente, un 94,8 por ciento se mostró partidario de dedicar más recursos económicos, siendo las mujeres (96,7) y los jóvenes de 18 a 24 años los que más a favor se posicionaron (97,1), mientras que un 95,9 también apostó por aumentar las plantillas del SNS, de ellos el 97,3 por ciento era mujer y los que más a favor estaban eran los encuestados de 55 a 64 años (96,8%).
Aumentar la coordinación entre las CCAA (89,8) y aumentar las instalaciones y los recursos dedicados a prevenir y abordar las pandemias (87,4) fueron dos reformas apoyadas por necesarias entre la mayoría de la población.
En cuanto a la urgencia de estas reformas, apoyada por el 95,9 serán el dotar de más profesionales las plantillas de sistema sanitarios, frente al 3% que considera que es ‘poco’ o que la urgencia es ‘regular’; y le sigue el aumento de recursos económicos apoyado por el 95,6 por ciento frente al 3,5 por ciento que ve desde ‘poca’ a ‘apenas’ urgencia.
Por detrás, pero de cerca, un 91 por ciento está a favor de aumentar la coordinación entre las CCAA con ‘bastante’ o ‘mucha’ urgencia, frente al 7,6 por ciento no ve necesario una reforma urgente; y, finalmente, un 90,2 por ciento de los que están a favor de cambios en el SNS apuestan también por aumentar las instalaciones y los recursos dedicados a prevenir y abordar las pandemias, mientras el 8,6 cree que debe de realizarse este cambio pero no es urgente.