Recurrir a la reproducción asistida ya no tiene por qué ser sinónimo de embarazo múltiple.
Gracias a los nuevos protocolos de actuación, a los avances tecnológicos y a la existencia de tratamientos personalizados, los embarazos múltiples y la hiperestimulación ovárica disminuirán al optar por la reproducción asisitida.
Es una de las conclusiones obtenidas en el XXX Congreso Nacional de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) celebrado en Barcelona, y una estupenda noticia que llega en el Mes Internacional del Cuidado de la Fertilidad.
Reducir estas dos complicaciones supone un gran avance en el futuro de la reproducción asistida. De hecho, el embarazo múltiple es la complicación más común de las técnicas de reproducción asistida. Hay que tener en cuenta que las cifras de embarazo gemelar con tratamientos de reproducción asistida se sitúa entre el 20% y el 30% y el objetivo de los profesionales es que esta tasa sea cada vez más cercana a las cifras que se dan de forma natural.[show_more more=»Leer más» less=»Ocultar»]
Las cifras, “se están reduciendo gracias al uso de técnicas más eficientes: una mejor selección embrionaria y las posibilidades que ofrece la vitrificación”, en palabras de la doctora Rosa Tur, experta del Comité Organizador del Congreso. En este sentido, explica Tur, “se ha llegado a cierto consenso en cuanto a la necesidad de poner en práctica medidas para reducir su incidencia, como es la tendencia a incorporar la transferencia selectiva de un embrión, aunque esto es muy variable entre países”.
Los últimos datos del Registro de la SEF (2011), señalan que más del 80% son transferencias con más de un embrión, “aún conociéndose que la multiplicidad se asocia a un aumento de la prematuridad y muerte ante parto”, explica Tur.
En realidad, hay más de 200 factores que pueden afectar a los resultados del laboratorio, “por lo que es necesario trabajar de acuerdo a un sistema de calidad, estandarizar los procedimientos mediante protocolos normalizados de trabajo, consensuados y establecer un sistema de revisión continuada de los resultados”, explicó la doctora Montserrat Boada, embrióloga y miembro también del Comité Organizador del Congreso.
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El correcto funcionamiento del laboratorio de Fecundación In Vitro (FIV) es fundamental para tener embriones de la mejor calidad posible. Pero es importante tener en cuenta que el resultado final no depende solo del laboratorio, sino también de los factores intrínsecos de cada paciente.
Una de las claves de la eficacia de las técnicas de reproducción asistida es la implantación de embriones de calidad, algo por lo que se están introduciendo nuevas técnicas, tanto en el cultivo como en la selección de los embriones.
Por ejemplo, se ha introducido un nuevo método de selección embrionaria a través de la tecnología “time-lapse” que permite un análisis detallado del desarrollo embrionario durante todo el periodo “in vitro” y que permite detectar nuevos parámetros que pueden ser relevantes a la hora de predecir los embriones con mayor capacidad de implantación”.
Evitar la hiperestimulación ovárica es otro de los retos de la Fecundación In Vitro, aunque su incidencia es mucho menor, no superando el 1%. Otro de los temas tratados en profundidad en el congreso es la “preservación de la fertilidad”.
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Cada vez es más frecuente que “las mujeres decidan criopreservar su material reproductivo para utilizarlo en un futuro reduciendo así los riesgos que se pueden asociar a la edad o tener opción para ser madre después de un tratamiento oncológico”, señaló la doctora Tur. Desde hace unos años se ha optado por vitrificar los ovocitos en lugar de los embriones, una técnica que aunque aún no ha ofrecido muchos datos, “parece ofrecer excelentes expectativas”, explicó Tur.[/show_more]
